LA LUCHA POR LA TIERRA


Antes de la llegada de los españoles, el Pueblo Mixe de Candoyoc ocupaba una amplia extensión del territorio comprendido en la zona limítrofe de los estados de Oaxaca y Veracruz. Sin embargo en 1737, tras el despojo de la conquista, el Pueblo Mixe de Jaltepec Candoyoc se vio obligado a comprar a la corona española, en 800 pesos oro y plata -recibidos como pago dado por servicios prestados en las incipientes haciendas de los propios españoles- una superficie de 108 leguas cuadradas de tierras, equivalente a 335,394 hectáreas, de lo que había sido su territorio. Válgame el cielo. Compraron lo que había sido de ellos, de lo que los expoliaron los conquistadores venidos de allende el Atlántico.

El Pueblo Mixe de Jaltepec de Candoyoc siguió detentando la propiedad y la posesión de las tierras por varios siglos. Tras la Revolución, el territorio fue debidamente reconocido como propiedad comunal. No obstante, entre 1956 y 1958 el Gobierno Federal expropió 18,648 hectáreas de la propiedad ancestral de esta comunidad, sin previa consulta ni posterior indemnización. En esos años, se dijo que dichas tierras servirían para reubicar a las personas afectadas por la construcción de las presas "Cerro de Oro" y "Miguel Alemán" en la cuenca del Río Papaloapan. Pese a ello – narran los propios historiadores mixes - una parte de las tierras fueron utilizadas para fines distintos y el monto destinado a la indemnización fue entregado a un falso propietario muy bien relacionado con los poderosos de aquél tiempo. Desde entonces, el despojo ha continuado.

La situación se ha visto agravada, durante la administración del desalmado Ruiz “O” en el gobierno del Estado de Oaxaca. En el año de 2007, 2,050 hectáreas de las tierras que no fueron utilizadas para la expropiación, y que son propiedad colectiva del pueblo Mixe de Jaltepec de Candoyoc, fueron declaradas "Zona de Reserva Ecológica", sin previa consulta con la comunidad. Es importante destacar que aun cuando se presenta como una iniciativa en favor del medio ambiente, el establecimiento unilateral de una zona de reserva dentro de la tierra y el territorio de una comunidad indígena como lo es Jaltepec, contribuye a desmembrar la propiedad comunal, amén de que pasa por alto que si estas zonas son ricas en biodiversidad es justamente porque han sido los pueblos originarios quienes las han conservado. Así, en ausencia de consulta, se violan los derechos colectivos de la comunidad de Jaltepec de Candayoc Mixe.

Ante esta situación, que actualizó las amenazas en contra de la tierra y el territorio del Pueblo Mixe de Jaltepec de Candoyoc, las autoridades tradicionales junto con SER – MIXE se dedicaron a recuperar todos los documentos que acreditan la propiedad originaria de esos predios, con miras a acudir ante los tribunales locales. Después de un largo proceso de organización, el 5 de enero de 2009 se interpuso una Demanda de Amparo ante el Juzgado Primero de Distrito de la ciudad de Oaxaca, solicitando protección de la Justicia Federal en contra del decreto expropiatorio que sirvió para la usurpación de 18,648.90-32 hectáreas de terrenos de Jaltepec de Candoyoc sin indemnización alguna; así como en contra del Decreto emitido por el Gobierno de Oaxaca en el que declara 2,050 hectáreas de las tierras expropiadas a esta comunidad indígena como "Zona de Reserva Ecológica". La demanda ya ha sido admitida y avanza satisfactoriamente: ha sido ordenado que el gobierno de Oaxaca suspenda todo acto dentro del territorio de Jaltepec de Candoyoc.

En su demanda, las autoridades tradicionales de Jaltepec de Candayoc Mixe y el equipo de SER - MIXE han alegado que los actos que impugnan violan los derechos colectivos de los pueblos indígena, en especial los derechos territoriales de la comunidad de San Juan Jaltepec de Candayoc. Es importante destacar que por la manera en que el caso ha sido planteado, la resolución de su demanda podría constituir un precedente importante en la reivindicación del derecho a la tierra y al territorio de los pueblos originarios de nuestro país. En tal sentido, es paradigmático de las luchas contemporáneas de los pueblos indígenas en México.

Por ello, las autoridades tradicionales de Jaltepec de Candoyoc Mixe y el equipo de SER MIXE, apoyados por otras organizaciones como el Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez, acudirán a instancias internacionales como el Relator para los Pueblos Indígenas de la Organización de Naciones Unidas para difundir los esfuerzos que realizan para recuperar las tierras que originariamente les pertenecen y en el caso de no obtener resultados positivos, prevén acudir a la Comisión y la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Una lucha de derecho, derecha. Los indios de este continente viven en las laderas de las montañas, o en parajes inhóspitos porque los colonizadores se adueñaron, los expoliaron, de sus territorios en las planicies y en los llanos, donde corren los ríos y las tierras son generosas para todo cultivo. Eso me recuerda el caso del Valle de Jobel, hoy San Cristóbal de Las Casas, de donde hace 500 años los españoles despojaron a los indios mayas de esas tierras ricas en humedales para construir su ciudad y sus palacetes y ahora los cerros, las montañas que rodean la ciudad están pobladas por los dueños originarios del valle. Los indios viven mal, en tierras improductivas, pedregosas, sin agua, con un clima en extremo frío y sólo bajan a San Cristóbal para malbaratar sus exiguos productos, principalmente animales de corral, que les son arrebatados materialmente por los comerciantes – Chayito Castellanos, la inmemorial, ha escrito mucho sobre esta situación de despojo y expropiación, y a tales comerciantes coletos les llama “atajadoras” que forman un grupo de mujeres abusivas que van a los cruces de los caminos a “atajar” a los indios y arrebatarles gallinas, pollos, puerquitos entre otros productos y les pagan por ellos lo que se les antoja. La historia de Jaltepec de Candayoc Mixe, no es aislada.

Es la historia de los pueblos y comunidades indias de América Latina. Triste historia.